Se ha detectado una variante más transmisible del SARS-CoV-2, B.1.1.7, en 12 estados de EE. UU. Se realizaron unos estudios y simulación basados en la experiencia que tuvieron en los casos de Reino Unido, los datos de modelos indican que B.1.1.7 tiene el potencial de incrementar la trayectoria de la pandemia en los EU, especifican que no se ha encontrado evidencia de que tenga mayor mortalidad que las primeras variantes, sin embargo, lo preocupante es que si tiene mayor índice de transmisión, por lo que pudiera llegar a más personas y con eso aumentar el número de casos que requerirán hospitalización en un sistema de salud el cual ya está colapsado por la situación de la pandemia. En los próximos meses, la CDC aumentará la disponibilidad de datos de vigilancia genómica oportunos en los EE. UU, para llevar a cabo una vigilancia epidemiológica más cercana de los casos y variantes que puedan surgir. El aumento de la transmisibilidad de la variante B.1.1.7 justifica un mayor apego a las estrategias de mitigación, incluido el distanciamiento y el uso de mascarilla. Es posible que sea necesario lograr una mayor cobertura de vacunación para proteger al público.